Una opción para el Hide de las Águilas
Como en todas las carroñadas el factor suerte siempre influye. Al observar a distancias cortas, la interacción entre distintas especies en este sitio es espectacular. Conseguir la máxima satisfación personal aquí es lo que cuenta. Ser paciente, preceder la foto y saber actuar en el momento, es fundamental para conseguir buenos resultados. Yo en esta sesión, he centrado la mayoría de mis fotografias a fotograma competo, en miradas a modo de retrato.
Canon 7D. Canon 400mm f5,6. f7.1 1/400 ISO 640
Buitre negro. Aegypius monachus.
Canon 7D. Canon 400mm f5,6. f5.6 1/640 ISO 800
Traer dos equipos aquí es un gran acierto, puedes llevarte distintas fotos en el mismo momento, yo he utilizado dos focales fijas (200mm y 400mm). Para conseguir estas aproximaciones he sido muy paciente y no disparé ninguna foto hasta el final, cuando los últimos pedazos de carne que quedaban estaban más próximos al hide. Así garanticé su máxima confianza. Precipitarse al principio por no poder contenerse al ver la acción, podría haber desencadenado la huida masiva y así retrasar este momento.
Canon 7D. Canon 400mm f5,6. f6.3 1/800 ISO 500.
Canon 60D. Canon 200mm f2,8. f8 1/400 ISO 500.
Milano negro. Milvus migrans.
Simultáneamente y a distintas distancias, se pueden hacer retratos diferentes con las dos focales, sabiendo selecionar aquellos ejemplares aislados y asi congelar su acción.
Canon 7D. Canon 400mm f5,6. f8 1/640 ISO 500.
Canon 60D. Canon 200mm f2,8. f8 1/400 ISO 500.
Buitre leonado. Gyps fulvus.
Una vez acabado el festín, los milanos seguirán reclamando lo que empezaron y tomarán las troncas de forma aleatoria.
Milano negro. Milvus migrans.
Canon 7D. Canon 400mm f5,6. f8 1/320 ISO 500.